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lunes, 23 de febrero de 2015

Hermano Gorila. Eva Colomina. Fotógrafos y animales.




Un hermoso proyecto fotográfico de Eva Colomina



Después de dedicarnos durante las últimas entradas a observar proyectos fotográficos que desafían los límites de nuestra percepción visual e indagan en cómo esta compone la imagen de nuestros propios rostros, creo que no es inoportuno volver a los animales no humanos precisamente a través de la mirada de los antropoides, retomando también el hilo de nuestra sección dedicada a la imagen del mono, la más visitada de nuestras páginas temáticas. Creo que nos dará un buen pié a nuestro próximo artículo sobre las fronteras entre animales y animales humanos a través de la palabra. De un mudo o un sordomudo no se nos ocurre decir que sólo le falta hablar para ser una persona, pero es un tópico comentario que constata la noción popular de que los animales tienen personalidad, y un mundo interior que transmiten a través de su mirada, sus gestos y sus interacciones. Si el género del retrato fotográfico es aplicable a criaturas no humanas es por una mezcla de humanización involuntaria, fruto de las improntas de nuestra percepción, tanto como por la evidente capacidad empáticamente reflexiva de cruzar la mirada entre cualquier especie zoológica. La cámara y la visión del fotógrafo son excelentes intermediarios de esta selectiva percepción del mundo y de las criaturas.
Los animales son algo más que soluciones anatómicas alternativas, especializadas o caprichosas dignas de ser exhibidas en un catálogo, opinión que ya hemos expresado reiteradamente al respecto de la existencia de bestiarios, colecciones y exhibiciones zoológicas circenses o de cualquier índole.
He trabajado para diversas exposiciones zoológicas, casi siempre de carácter temático bastante específico, y entiendo muy bien la atracción que estos lugares ejercen sobre nuestra curiosidad más atávica y sobre nuestros afectos hacia la cercanía de los animales que consideramos hermosos, fascinantes, atractivos o atemorizadores. Pero ya he dicho en muchas ocasiones que pese a ello siempre me había pesado una cierta desazón, una sensación de trabajar para el enemigo engañosamente bienintencionado. Los zoológicos son prisiones. Suponen el encierro traumático de animales necesitados de su entorno natural y de la autogestión de su supervivencia, de expectativas, y, a menudo, de una relación social normal con los de su especie. Los elefantes solitarios son raros en la naturaleza y desdichadamente anómalos en aislado cautiverio. Imaginaos a vosotros mismos fuera de vuestro contexto habitual, desprovistos de vuestros recursos y vuestras relaciones sociales. Vuestro cuerpo vivo y en movimiento sólo daría testimonio de vuestra presencia física, pero ya sólo existiríais en el abismo de vuestros pensamientos.



Tal y como nos habían conmovido e interesado los trabajos de animales en cautiverio de Manuela Kulpa o de Britta Jaschinski, y habiendo vivido durante un tiempo significativo de mis actividades profesionales (e inevitablemente personales) en el Zoo de Barcelona, célebre durante años por la presencia del gorila albino Copito de Nieve, al alcance de los proyectiles de su hijo Urko, me ha parecido oportuno volver a nuestra habitual antrozoología artística, preferentemente fotográfica, de la mano de la fotógrafa Eva Colomina, quien amablemente me ha ofrecido el material que ilustra este post. Gracias a nuestra coincidencia en el contexto de la Escola d'Art de l'Hospitalet, hemos podido charlar sobre diversos aspectos de este tipo de proyectos fotográficos y de su propia selección de imágenes para dar su visión de los gorilas como figurantes de un espectáculo en el que, pese a todo, viven su vida y sienten el paso de los estados de ánimo rodeados de absurdo paisaje humano itinerante y pasajero.
"Hermano gorila" es un proyecto que habla sin palabras. Las palabras tal vez asomen a nuestros pensamientos al contemplar las imágenes de este reportaje, pero no nos cabe duda de que, con palabras o sin ellas, pensamientos claros, nítidos, pasan por por los individuos que nos observan o nos ignoran al otro lado del objetivo de Eva.



















Gran formato e Interiores con Animales (Fotógrafos y animales. Animales y arquitectura: Karen Knorr y Mikel Uribetxeberría)

Karen Knorr: La cámara de la Reina (Fábulas)
La separación entre el mundo animal y el mundo humano se evidencia, más posiblemente que en cualquier otro modo, en la separación de espacios (la territorialidad es la madre de todas la relaciones interespecies) destinados a ser habitados por unos u otros. Los establos, perreras, cuadras, gallineros y corrales de toda índole lo constatan. Los animales que comparten el calor del mismo hogar que los humanos pertenecen a una categoría especial, la de las mascotas, que les otorga un peculiar régimen como miembros de la familia. 


Mikel Uribetxeberría (Animalia)
No obstante, del mismo modo que ciertos entornos paisajísticos potencian lo llamativo de la presencia de un humano desnudo en trabajos pictóricos o fotográficos, por mucho que remitan a un paraíso natural arquetípico (evidenciando que se trata de un paraíso ya perdido), también es cierto que nuestra ocasional desnudez queda todavía más desamparadamente en evidencia en entornos públicos y urbanos. Algo similar ocurre con animales salvajes o domésticos cuyas características les impiden normalmente estar presentes en espacios dedicados a los seres humanos: los interiores arquitectónicos. 
Mikel Uribetxeberría (Animalia)
Cuanto más lujosos y exquisitos más chocante resulta su presencia, aunque en ocasiones, la sofisticada belleza de determinados ejemplares los convierta en exóticos elementos decorativos tal y como lo podrían ser ciertos tipos de plantas vivas o de arreglos florales. Buscar el límite turbador de todo ello formaba parte de las intenciones del proyecto Animalia, de Mikel Uribetxeberría del que dábamos cuenta tiempo atrás en nuestro blog, pero el mérito técnico de este fotógrafo consistía en hacer creíble la presencia de los animales en espacios arquitectónicos diversos mediante sofisticados fotomontajes de gran potencia dramática.

Hoy volvemos a los interiores con animales gracias a un proyecto fotográfico de Karen Knorr que nos ha gustado especialmente por el resultado final de las imágenes, fieles a los cánones metódicos de la fotografía de arquitectura con cámaras de gran formato y estructura flexible, que posibilita descentramientos ópticos que corrigen las fugas y la perspectiva y que dan una calidad de detalle extraordinaria. 

Con unos encuadres e iluminaciones muy estudiados, las fotos de Knorr recuerdan a imponentes cuadros al óleo cortesanos que testimonian la riqueza material de los espacios reproducidos, cuya exquisitez se ve potenciada no por la presencia de sus propietarios y habitantes humanos, sino por animales que están ahí para recordarnos la distancia existente entre "doméstico" y "domesticado". Para ello, al igual que en el caso de Uribetxaberría, ha tenido que recurrir al fotomontaje digital, que le ha exigido, dado el origen analógico de gran formato de sus escenografías, fotografiar con tecnología digital de alta resolución los animales salvajes o en cautiverio que ha seleccionado para "habitar" estos espacios a modo de ilustración de mitos culturales propios de los lugares en que se encuentran cada uno de los templos y palacios que ha visitado con su cámara. La paradoja más evidente en las imágenes de Knorr es que los animales, originalmente, en muchos casos, fotografiados en zoológicos y reservas naturales que limitan su libertad salvaje, ofrecen en estos interiores una actitud que se salta las normas humanas y, por tanto, les dota de un aire de libertad un tanto contradictorio pero en todo caso conmovedor. La ausencia de seres humanos da más fuerza a esta idea y nos recuerda la diferencia entre encierros voluntarios y encierros obligatorios, encierros reales y encierros ficticios.

El trabajo de Knorr nos lo ha descubierto, documentado y concretado Javier Fuentes a través de "El Hurgador del Arte", uno de los mejores escaparates on line de arte contemporáneo e intemporal, i os ofrecemos un extracto de su entrada original, de la que no hemos podido evitar conservar textos y disposición dado el excelente trabajo divulgativo que hace su autor. Os recomiendo visitar la entrada original en el enlace que ofrezco a continuación, porque Javier nos ofrece, además, un buen reportaje fotográfico e información adicional de los lugares que han servido de escenario a las fotografías de Karen Knorr, además de enlaces a muestras de otros muchos artistas en "El Hurgador". Después de nuestro extracto dedicado a Knorr, os invitamos a comparar su trabajo con el del comentado Mikel Uribetxeberría, que ya habíamos mostrado y comentado con anterioridad y que vale la pena traerlo a colación.


LUNES, 16 DE FEBRERO DE 2015


Karen Knorr [Fotografía]

En la obra reciente de Karen Knorr, los animales se pasean libremente por espacios arquitectónicos de gran riqueza y colorido, fotografiados con cámaras de gran formato y exquisito detalle.
Traducción al inglés al final del post, señalada con [*] en cada párrafo.

In the recent work of Karen Knorr, animals freely roam architectural spaces of great richness and colorful, photographed with large format cameras and exquisite detail.
English translation at the end of the post, marked with [*] in each paragraph.
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Karen Knorr

Karen Knorr nació en Frankfurt am Main, Alemania, y se crió en San Juan, Puerto Rico, en los '60s. Terminó sus estudios en París y Londres. 
Karen ha enseñado, exhibido y dado conferencias a nivel internacional, en lugares que incluyen Tate Britain, Tate Modern, la Universidad de Westminster, Goldsmiths, Harvard y el Art Institute of Chicago.
Actualmente es profesora de fotografía en la Universidad de Artes Creativas de Farnham, Surrey. [1]

La canción de la India / India Song
"La alegría de Ahimsa / The Joy of Ahimsa", Takhat Vilas, Fuerte de Mehrangarh Fort, Jodhpur, India

«La fotografía, para mí, es una metodología visual que me permite comprender y aprender acerca del mundo que me rodea. Toda la obra que he hecho tiene en cuenta la cultura de las bellas artes y sus relaciones con el poder. Hay efectos positivos y negativos en la forma como el poder se entrelaza con el arte, y usa la estética para legitimar su narrativa.» [2]

Monogatari / Historia / Tale
"Cultivando la felicidad / Cultivating Happiness", Templo Chishaku-in Temple, (Kyoto, Japón / Japan)

La canción de la India / India Song
"El regreso del cazador / The Return of the Hunter", Palacio de Jaipur Palace (Jaipur, India)

«Si las obras desafían o no al poder, es algo que está en el ojo del que mira, ya que muestran la ambigüedad y belleza de lo que el poder puede construir, diseñar y comprar. Hay una cierta ambivalencia acerca del poder en esas imágenes, porque celebran claramente la arquitectura y artesanía Rajpuy y Rajastaní. Este esplendor arquitectónico es el resultado del poder económico de los Maharajás. Famosos artistas de la época, miniaturistas y músicos, se nutrieron del patronazgo de los Maharajás, Nawabs y Nissams desde tiempos antiguos hasta nuestros días. Las diferentes escuelas de pintura en miniatura tienen estilos distintivos, y esos estilos continúan desarrollándose en la India. Mi obra refiere, y rinde homenaje, al exquisito detalle que se encuentra en las miniaturas indias y persas. 

Las aves y mamíferos insertados en las fotografías enlazan la cultura Ramayana del norte de la India con representaciones alegóricas de la femineidad y masculinidad que buscan perturbar las expectativas del espectador creando disturbios "visuales" en salas privadas de palacios, algunos de los cuales son hoy en día museos privados. Un ejemplo es Vuelo a la Libertad, donde una elegante grulla blanca va dando gráciles zancadas a través de la Sala Durbar de un antiguo palacio familiar privado en Dungarpur. El Palacio de Dungarpur es uno de los sitios más mágicos que he visitado y podría pasarme horas sentada mirando la luz moverse a través de los cristales coloreados de las ventanas, reflejándose en los espejos incrustados en las paredes.» [3]

Fábulas / Fables
"Corredor / Corridor", Carnavalet (París, Francia / France)

La canción de la India / India Song
"El apartamento del Maharaja / The Maharaja's Apartment"
Palacio de Udaipur City Palace (Udaipur, India)

La canción de la India / India Song
Los Palaiyakkarars, Templo Hazarama Temple (Hampi, India)

Karen Knorr celebra la rica cultura visual, los mitos fundacionales e historias del norte de la India, centrándose en el Rajastán y utilizando sitios sagrados y seculares para considerar la casta, la femineidad y sus relaciones con el mundo animal. Los interiores son laboriosamente fotografiados con una cámara Sinar P3 analógica de gran formato, y escaneados en una resolución muy alta. Los animales vivos son insertados en los sitios arquitectónicos fusionando alta resolución digital con fotografía analógica. Animales fotografiados en santuarios, zoos y ciudades, habitan palacios, mausoleos, templos y lugares sagrados, interrogando al patrimonio cultural de la India y la rigidez de las jerarquías. Grullas, cebúes, langures, tigres y elefantes mutan desde mascotas principescas a avatares de personajes femeninos históricos del pasado, desdibujando las fronteras entre realidad e ilusión, y reinventando elPanchatantra para el s.XXI. [4]

Monogatari / Historia / Tale
Guardián del templo / Guardian of the Temple", Templo Nazen-ji Temple (Kyoto, Japón)

La grulla de Manchuria, que reside en China, Corea y Japón, es a menudo representada en mitos y leyendas del Taoísmo. Es un símbolo de la longevidad y aparece a menudo en biombos y pinturas en rollos. Más recientemente, es el emblema de las aerolíneas japonesas. [5]

La canción de la India / India Song
"Bhakti, El camino de Sants / The Path of Sants", Templo de Shiva Temple (Hampi, India)

Fábulas / Fables
"La cámara de la Reina / The Queen's Bedchamber"
Château de / Castillo de Chambord (Región del Loira, Francia / Loir-et-Cher, France)

Fábulas / Fables
"Galería de la Batalla / The Battle Gallery", Château / Palacio Chantilly (Francia / France)

El objetivo usual de una fábula es ofrecer una enseñanza o lección, llamando la atención sobre la conducta animal y sus relaciones con las acciones humanas y sus defectos. Los animales en las fábulas hablan metafóricamente de la locura humana, criticando la naturaleza humana. Aunque parece que la naturaleza de la obra de Karen Knorr tiene otro objetivo. En las "Fábulas" de Knorr los animales no están vestidos emulando humanos, ni tampoco ilustran una moral explícita. Liberados, vagan libremente por territorios humanos, llamando la atención sobre la brecha sin puentes entre la naturaleza y la cultura. Ellos invaden los dominios de los museos y otros santuarios culturales en los cuales tienen estrictamente prohibido el acceso. [6]

La canción de la India / India Song
"Vuelo a la Libertad / The Flight to Freedom", Durbar Hall, Juna Mahal (Dungarpur, India)

La canción de la India / India Song
"El sonido de la lluvia / The Sound of the Rain", Fuerte Junagarh Fort (Bikaner, India)

Monogatari / Historia / Tale
"Viaje al Gran Sabio / Journey to the Great Sage", Templo Hosen-in Temple (Ohara, Japón / Japan)

Una serie iniciada en 2012 que imagina la vida animal y el patrimonio cultural japonés en referencia a los cuentos budistas Jataka y las historias del Japón.

Fotografiados en templos, pagodas, ryokans y jardines en Kyoto, Nara, Ise y Tokyo, animales y mujeres con kimonos tradicionales evocan el arte de pantallas del período Edo. Knorr, inspirada en el arte japonés (ukiyo-e, pintura de biombos) ha producido una serie de fotografías de animales japoneses que aparecen en templos y pagodas, en referencia a los cuentos populares de lo sobrenatural, como Kaidan y Shinto Kami (espíritus). [7]

La canción de la India / India Song
"El portero / The Gatekeeper", Palacio de Samode Palace (Samode, India)

Fábulas / Fables
"Recepción de los reyes / The Kings Reception"
Château de / Castillo de Chambord (Región del Loira, Francia / Loir-et-Cher, France)

Indiferente, el animal parece "otro", un extraño en el contexto en el que está inserto. El animal no es el tema de la obra, y tampoco lo es la arquitectura. La obra de Karen Knorr nos muestra la inconmensurable distancia entre ambos mundos: la naturaleza salvaje por un lado, y por el otro un sitio cultural en el cual a la naturaleza sólo le está permitido entrar en forma de representación. Aunque pacífica, la intrusión de la presencia animal subvierte la institución. La obra resalta el caracter contra-natura del museo en sí mismo.

La obra de Karen asume completamente esta paradoja y juega con la puesta en escena de la percepción de la naturaleza dentro del dominio de la representación y el artificio. Los animales expuestos no están aquí como en casa, y ocupan las salas libremente. Al escoger trabajar con las salas de los museos, Karen actúa como el Flautista de Hamelin, trayendo otros animales a unirse a los residentes en el Museo Carnavalet, el Castillo de Chambord, el Castillo Chantilly y la Villa Savoye. Luego de esta forma de turismo cultural, los animales retornan a su hogar en el museo. [8]

La canción de la India / India Song
"Los Avatares de Devi / Avatars of Devi", Palacio de Samode Palace (Samode, India)

Fábulas / Fables
"La sala de música 1 / The Music Room 1", Château / Palacio Chantilly (Francia / France)

La extrañeza de esta nueva serie de Fábulas no sólo reside en la disyunción entre naturaleza y cultura. Karen Knorr utiliza juguetonamente la tecnología digital para mezclar lo digital con lo analógico. 
Los intrincados detalles de las sombras dibujadas en un cojín, las sombras del fino plumaje o el contorno de un muslo humano, desdibujan los límites entre la realidad y la ilusión. Más allá de la inmediata seducción de las imágenes fotográficas en sí mismas, es esta ambigüedad lo que les confiere una fuerza particular. [9]

La canción de la India / India Song
"Discussions concerning Rasa / Discusiones relativas a Rasa"
The Phool Mahal, Mehrangarh Fort (Jodhpur, India)

La canción de la India / India Song
"Un lugar como Amravati / A Place like Amravati", Palacio de la Ciudad / City Palace (Udaipur, India)
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Los textos están tomados del sitio web de la artista, y de dos extensas entrevistas que también pueden leerse completas allí en la sección "Writings":
Karen Knorr entrevistada por Niccolo Fano para la revista italiana online Fotografía: Punks, Elites y cultura secular de la India, 2014 y 
Karen Knorr entrevistada por Nirita Agrawal, publicado en la revista Cultural Documentor Marwa, Mumbai, India, 2012

Texts from artist's website, and two extensive interviews you can also read there, in "Writings" section:
Karen Knorr interviewed by Niccolo Fano for Italian online magazine Fotografia : Punks, Elites and India’s Secular Culture 2014
Karen Knorr interviewed by Nirita Agrawal published as the Cultural Documentor Marwar Magazine, Mumbai , India 2012
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Más imágenes e información sobre Karen en / More images and information about Karen in

Imágenes publicadas con autorización de la artista (¡Muchas gracias, Karen!)
Images published here with artist's permission (Thanks a lot, Karen!)



Los Ángeles, Reseñas de libros / LA Review of Books
Fotógrafa en el foco (en inglés) / Photographer Spotlight: Karen Knorr

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Festival del Fotografía de Delhi / Delhi Photo Festival, 2013 (en inglés)
Charla de la artista / Artist Talk: Karen Knorr



Traducción al inglés / English Translation

[1]
Karen Knorr was born in Frankfurt am Main, Germany and was raised in San Juan, Puerto Rico in the 1960s. She finished her education in Paris and London. Karen has taught, exhibited and lectured internationally, including at Tate Britain, Tate Modern, The University of Westminster, Goldsmiths, Harvard and The Art Institute of Chicago.
She is currently Professor of Photography at the University for the Creative Arts in Farnham, Surrey.

[2]
«Photography, for me, is a visual methodology which allows me to understand and learn about the world that surrounds me. All the work I have made considers fine art culture and its relationship to power. There are negative and positive effects to the way power intertwines with art, and uses aesthetics to legitimize its narrative.»

[3]
«Whether the work actually challenges power is in the mind of the beholder, since it shows the ambiguity and beauty of what power can build, design and purchase. There is a certain ambivalence about power in these images because clearly they celebrate Rajput and Rajasthani architecture and craft. This architectural splendor is the result of the Maharaja’s economic power. Famous artists of the time, miniaturists and musicians, were nurtured and patronised by the Maharajas, Nawabs and Nissams of long ago as they are today. The different schools of miniature painting have their distinctive styles, and these styles continue to develop in India. My work refers, and pays homage, to the exquisite detail found in Indian and Persian miniatures.

The birds and mammals inserted in the photographs link the Ramayana culture of Northern India to allegorical representations of femininity and masculinity that aim to disturb the spectator’s expectations by creating ‘visual’ disturbances in private rooms in palaces, some of which are now private museums. An example is The Flight To Freedom, where an elegant white egret strides gracefully through the Durbar Room of an old private family palace in Dungarpur. Dungarpur palace is one of the most magical sites I have ever visited and I could sit for hours watching the light move through the coloured glass windows, reflected off the mirrors embedded in the walls.»

[4]
Karen Knorr celebrates the rich visual culture, the foundation myths and stories of northern India, focusing on Rajasthan and using sacred and secular sites to consider caste, femininity and its relationship to the animal world. Interiors are painstakingly photographed with a large format Sinar P3 analogue camera and scanned to very high resolution. Live animals are inserted into the architectural sites, fusing high resolution digital with analogue photography. Animals photographed in sanctuaries, zoos and cities inhabit palaces, mausoleums , temples and holy sites, interrogating Indian cultural heritage and rigid hierarchies. Cranes, zebus, langurs, tigers and elephants mutate from princely pets to avatars of past feminine historic characters, blurring boundaries between reality and illusion and reinventing the Panchatantra for the 21st century.

[5]
The red crowned crane which resides in China, Korea and Japan is often featured in myths and legends in Taoism, it is a symbol of longevity and appears often in screens and scroll paintings. More recently it is the emblem of Japanese airlines. 

[6]
The usual aim of the fable is to teach a lesson by drawing attention to animal behaviour and its relationship to human actions and shortcomings. Animals in fables speak metaphorically of human folly, criticizing human nature. Yet it seems that the nature of Karen Knorr’s work has another aim. In  Knorr’s  “Fables”  the animals are not dressed up to resemble humans nor do they illustrate any explicit moral. Liberated, they roam freely in human territory drawing attention to the unbridged gap between nature and culture. They encroach into the  domain of the museum and other cultural sanctuaries which resolutely forbids their entry.

[7]
A series started in 2012, imagines animal life and Japanese cultural heritage referencing buddhist Jataka tales and Japanese stories.

Photographed in temples, shrines, ryokans and gardens in Kyoto, Nara, Ise and Tokyo, animals and women in traditional kimonos evoke screen art of the Edo period. Knorr, inspired by Japanese art (ukijo-e, screen painting) has produced a series of photographs of Japanese animals which appear in temples and shrines referencing the folktales of the supernatural such as Kaidan and Shinto kami (spirits).

[8]
Indifferent, the animal remains “other”, a stranger to the context in which it is inserted. The animal is not the real subject of the work nor is architecture. Karen Knorr’s work shows us the incommensurable distance between two worlds: raw nature on the one hand and on the other the cultural site which allows nature entry only in the form of a representation. Although peaceful, the intrusion of the animals’ presence subverts the institution. The work highlights the “against nature” character of the museum itself.

Karen Knorr’s work assumes this paradox fully and plays with staging the perception of nature within the domain of representation and artifice. The animals displayed are at home here and occupy the rooms freely. In choosing to work with the rooms of museums Karen Knorr acts like the Pied Piper of Hamelin bringing other animals to join the existing animal residents in the Carnavalet Museum, Chambord Castle, Chantilly Castle and Villa Savoye. After this form of cultural tourism, the animals arrive back home to the museum.

[9]
The strangeness of this new series of Fables does not reside only in the disjunction between nature and culture.  Karen Knorr playfully uses digital  technology to mix the digital with the analogical. 
The intricate details of a shadow cast on a pillow, the shade of fine plumage, or the contour of a human thigh blur the boundaries between reality and illusion. Beyond the immediate seduction of the photographic images themselves, it is this ambiguity that gives them a particular force.


Mikel Uribetxeberría

Para no olvidar que esto es fundamentalmente un blog de antrozoología artística que pretende también ser testigo de la iconografía zoológica más significativa de las artes visuales contemporáneas, hace ya un tiempo que quiero destacar este proyecto fotográfico de Mikel Uribetxeberria, cuyo espíritu nostálgico, a modo de despedida de las especies animales, se manifiesta denunciando la ausencia a través de la presencia, reduciendo al absurdo los escenarios humanos en los que estas apariciones fantasmales de animales evocan, aunque tal vez desean conjurar, la ausencia del ser humano en su espacio natural.









Identidad e identificación afectiva del propio rostro. La original idea del fotógrafo Scott Chasserot.

El Fotógrafo Scott Chasserot, con su Proyecto Original/Ideal muestra cómo la gente se quiere ver.



Tal y como comenta Aria Bendix en el artículo original de BUSTLE del que extrajimos nuestras primeras anotaciones para esta entrada, en su proyecto fotográfico revolucionario titulado "Original / Ideal", el fotógrafo Scott Chasserot utiliza un escáner cerebral para revelar cómo la gente desea aparentar en la vida real. Al hacer esto, el proyecto tiene como objetivo responder una de las preguntas más apremiantes de la sociedad: ¿Qué encontramos instintivamente hermoso en el rostro humano, y cómo se traduce esto a la propia imagen? Aunque la tecnología es compleja, el proceso fue simple: Chasserot primero pidió 13 participantes posar para una solo toma de busto contra un fondo liso sin joyas, maquillaje o ropa. Luego manipuló sus rasgos faciales utilizando un software de edición para reflejar, como sus conclusiones en vídeo del proyecto, "cánones establecidos científicamente de la belleza." El resultado fue la auto-imagen ideal del sujeto.
Inmediatamente después, Chasserot equipó a los participantes con un auricular EEG diseñado para registrar e interpretar sus ondas cerebrales mientras visualizan las imágenes manipuladas. A continuación, presentó Chasserot a los participantes en el proyecto mediante una muestra simultánea de su foto original y su correspondiente "ideal". Luego buscó respuestas emocionales positivas entre los escáneres cerebrales resultantes para determinar qué foto preferían los sujetos.

Los resultados, apunta Bendix, son sorprendentes. La página web del proyecto de Chasserot describe la foto manipulada como "una preferencia cerebralmente sincera obtenida eludiendo el pensamiento consciente." Esto significa que inconscientemente, la mayoría de nosotros puede estar descontento con nuestra apariencia, o desea que fuera más acorde con los estándares de belleza normativos. Lo que es particularmente poderoso para la cronista Aria Bendix, cosa que compartimos a la vez que nos alerta sobre el alcance de este proyecto y su rigor, es la fotografía de Chasserot de un niño pequeño, cuya imagen ideal cuenta con una línea de la mandíbula más estructurada, y los ojos azules en lugar de marrón. La disparidad entre esta imagen y el original es la prueba viviente de lo profundamente arraigado de nuestro concepto de belleza a una edad temprana. Aún así, "original / Ideal" cuenta con una variedad de sujetos, lo que demuestra la gama con la que los estándares ideales de belleza se extienden por la edad, la raza y el género.

Ni que decir tiene que estamos ante una nueva actualización de nuestros trabajos sobre identidad y parecido facial a través de proyectos fotográficos que nos hacen reflexionar sobre nuestra manera de percibir los rostros e identificarlos no sólo como tales, sino como rostros conocidos, atractivos o intimidantes, más o menos ajustados a un esquema preestablecido basado en nuestras espectativas sociales y biológicas. La psicosociología de la percepción sustenta el alcance de la observación de este tipo de trabajos, y los consideramos, más allá de su innegable valor artístico, herramientas experimentales útiles, o cuando menos notables, para entender mejor nuestra manera de ver el mundo desde sus aspectos más básicos. El método afrontado por Chasserot tal vez podría ser criticable a la hora de su particular aplicación de las pautas básicas de simetría facial y distribución de los rasgos acorde a un esquema "ideal" de rostro armónico, bello, al que ya hicimos referencia a través de los estudios recopilados por el Profesor Antonio L. Manzanero.
Creo que el trabajo de Scott Chasserot es, posiblemente, el más conscientemente encaminado a ilustrar la problemática detrás de todos los ejemplos que hasta ahora hemos mostrado, pero también es cierto que sin duda seguiremos encontrando nuevas revisiones de crítica fotográfica. Un ejemplo de ello lo mostramos a continuación de las interesantes obras de Chasserot, y nos llegan del ámbito de la moda y las tendencias a través de una bloguera especializada en tutoriales de maquillaje bastante llamativos en su canal de youtube, Kandee Johnson. Es indudable que se trata de un ejemplo mucho más frívolo, casi anecdótico, en contraste con la metódica seriedad que Chase se esfuerza en reivindicar a la hora de dar a conocer los resultados de su obra, pero es precisamente por eso por lo que hemos rescatado a Johnson de los otros ejemplos que tenemos en espera para incluir en nuestro particular muestrario de estudios fotográficos de los rostros. Con la reciente aparición de PhotoLightPro, una aplicación para el ensayo virtual de la iluminación de retratos de estudio, han sido los autorretratos con diferentes caracterizaciones de Johnson lo que más nos ha llamado la atención para esta sección.

Mafa Alborés.





















Agradecimiento por las imágenes a Scott Chasserot



Kandee Johnson y su particular transformismo fotográfico a través del maquillaje.
Estamos ante una especie de juego en el que la autora demuestra su habilidad y pericia para transformar su propio rostro a la vez que instruye a sus seguidoras y seguidores, de forma amena y didáctica, en las diferentes técnicas del maquillaje del rostro, tanto desde un punto de vista cosmético o estético como interpretativo o caracterizador. Comprobar cuán difusas son ambas fronteras es el logro, tal vez involuntario, seguramente obvio, del trabajo de Kandee Johnson.

Os la queremos presentar con este típico retrato digno de la foto de perfil de cualquier red social, tal y como se mostraría normalmente en público, guapa y discretamente maquillada, para que lo contrastéis, más que con las siguientes caracterizaciones, con aquellas parejas fotográficas en las que muestra el antes y el después, en las que su rostro más íntimo, sin trazas de maquillaje, no sólo le sirve para realzar más los resultados de la foto con caracterización, sino para recordarnos que el rostro público, el habitualmente aceptado como normal, no es más que otra caracterización que se intenta adaptar a un convenio social de aceptación basado en la la belleza convencional del rostro, en parte atávica, biológica o instintiva, y en parte influenciada por las tendencias sociales y de la moda. Alguien podrá criticarme que tal vez no sea del todo oportuno asociar un trabajo como el de Johnson, que no aporta nada esencialmente nuevo al retrato fotográfico caracterizado, al proyecto de Chasserot, que supone una profunda implicación por parte del artista con el significado y objetivos de su trabajo, que apunta a pretensiones científicas más o menos concluyentes para los campos de la psicología de la percepción y las neurociencias, la sociología, la antropología y vé a saber cuántas disciplinas más. Lo cierto es que la coincidencia en el tiempo de publicitación mediática de ambos trabajos es suficiente, tal vez, para traerlos a colación simultáneamente, y, en todo caso, no hay duda que, desde diferentes perspectivas, abordan la problemática relación que mantenemos con nuestra propia imagen y la imagen de los demás en relación a criterios estéticos. Kandee Johnson sobreentiende el alcance de sus autorretratos con respecto a cómo son interpretados o simplemente disfrutados, bastante lúdicamente, por parte de su público, y no pretende hacer reflexionar sobre ello, aunque indudablemente lo consiga. Al fin y al cabo, se trata sólo de un divertimento con el que hacer más atractivos sus consejos y tutoriales sobre maquillaje y cosmética y hacer más atractivos y visitados sus vídeos al respecto en su canal de YouTube.

Sea como fuere, lo cierto es que el tono de ambos proyectos contrasta lo suficiente como para ilustrar muy bien los posibles puntos de vista ante la cuestión de la identidad y la identificación de rostros en relación a la personalidad (asociada al concepto de personaje o carácter) y al origen biológico, social y psicológico del mayor o menor atractivo de ciertos rostros en base a su ajuste a determinados cánones o proporciones. Como mínimo, las caracterizaciones de Johnson ilustran y ejemplifican los motivos que empujan a Chasserot a indagar seriamente sobre la cuestión.
















PhotolightPro. Un estudio fotográfico virtual.

http://photolightpro.net/


Aunque esencialmente no ofrece nada que no podamos extraer de otros programas como MAYA o 3D SudioMAX, PhotoLightPro constituye una novedad que confirma que todo proceso artístico que precisa de una fase de abocetado puede recurrir a aplicaciones digitales que simulan el espacio y los materiales de realización de la obra a la vez que "amenazan", con sus constantes mejoras, con sustituir incluso los resultados de la materialización de sus objetivos. Lo cierto es que, como docente de iluminación fotográfica, me siento tan entusiasmado como, al menos irónicamente, amenazado.




http://photolightpro.net/